sábado, 24 de diciembre de 2016

Y el Espiritu Navideño, ¿donde quedo?

Estamos a puertas de una de las fechas más importantes para los niños, La Navidad, una fecha muy esperada por ellos, sobre todo si son pequeños, y si aún creen en Papá Noel mucho mejor, sin embargo, en estos últimos días nos hemos dado cuenta que el espíritu navideño se ha perdido bastante y ahora todo está más orientado hacia el lado comercial, de repente siempre ha sido así, pero ahora que estoy del otro lado de la ecuación lo noto mucho más. Las tiendas hacen su agosto, setiembre y hasta octubre y los clientes, o sea nosotros, gastamos nuestra gratificación y tal vez algo más de lo que debemos y que no tenemos presupuestado, el uso del plástico está en su más alto nivel y las compras se hacen más por cumplir que por otra cosa.

Antes la navidad era una sorpresa para los niños, dependiendo de la costumbre de cada familia, algunos son despertados pasada la media noche y otros esperan al 25 en la mañana, como era conmigo, para bajar corriendo las escaleras y encontrar el árbol repleto de cajas y paquetes, no todos con mi nombre, pero al menos había algunos, y a esa hora de la madrugada me ponía a separarlos, pero sin abrirlos, solo para asegurarme que los tuviera más cerca. Luego de eso tenía que esperar a que alguien más bajara para poder recibir mis regalos, y muchas de esas veces me quedaba dormido en el sillón de la sala esperando. En aquellos años nunca me despertaba tan temprano, solo el 25 madrugaba como nunca.

Esta es nuestra cuarta navidad de a tres, nosotros acostumbramos recibir las 12 en la casa de los papás de Mary y el 25 almorzamos con mi familia. El tema de los regalos solo se aplica para los pequeños, así no hay mucho gasto, aunque en sentido figurado claro porque al final igual gastamos, la cosa es que nosotros compramos todo lo necesario el fin de semana luego del 15 para evitar la pelotera de gente y aprovechar la disponibilidad de efectivo, aunque desde que empieza diciembre ya se ve que el tráfico humano empieza a crecer radicalmente. Nosotros vamos a comprar las cosas juntos, incluyendo a la Bubu, ella se pasea por los anaqueles y escaparates sacando cosas y metiéndolas en el carrito de compra, obviamente no se le compra todo, pero por ahí que le liga algo. Como ella aun s pequeña, la idea de Papá Noel está en un estado de pausa, le decimos que los regalos nos los deja el en el departamento y los que les dan en las otras casas también los deja, pero es difícil que no relacione un regalo con la persona que se lo da físicamente, si tú le preguntas quien le regalo algo ella te contesta con Papi, Abu, Tata o algún otro nombre familiar pero nunca dice papá Noel. 

No sé si para el siguiente año ella nos deba acompañar a comprar las cosas, decirle que tiene que hacer su carta a Santa Claus y decirle que si ha sido una niña buena va a recibir regalos, o dejar que nos acompañe y que vea lo que realmente sucede en estas fechas festivas, que los regalos los compran personas como cualquiera de nosotros y que no existe un hombre de traje rojo y barba blanca que maneja un trineo volador guiado por renos. Sera bueno hacer que pise el suelo y sepa la verdad o que tenga esa parte de fantasía asociada con la Navidad hasta que tenga cierta edad, como sucedió conmigo cuando era niño. El problema es que la televisión y las tiendas no ayudan mucho, como todo es marketing al 1000% es muy difícil explicarle a una niña pequeña que realmente Papá Noel se encarga de todo y que los papás como nosotros solo paseamos por las tiendas y miramos las cosas sin comprar nada, ¿qué difícil dilema no creen?

PD: Este artículo no tiene ninguna intención de malograrle las fiestas a nadie en lo absoluto, solo es mi punto de vista sobre estas fechas que tanto incremento comercial tienen últimamente.

martes, 20 de diciembre de 2016

Días de Claustro

Cuando nuestros hijos enferman nosotros estamos más que al pendiente de lo que sucede, siempre queremos evitar toda posible enfermedad, infección o tratamiento longevo con nuestros hijos, porque es un desgaste impresionante de tantas cosas a la vez, y para cuando sucede, nosotros los padres, no escatimamos en nada, cueste lo que cueste, suceda lo que suceda, debemos sacar a nuestros hijos adelante como sea.

Sin embargo cuando la enfermedad nos asecha a nosotros la cosa cambia, perder la libertad y quedarse encerrado por varios días en una clínica, tratando de arreglar cualquier daño que pudiéramos estar sufriendo en ese momento, a sabiendas de que la familia está en casa y que es difícil que puedan ir a visitarnos porque podríamos causar algún daño colateral, es lo peor, más aún si tenemos niños pequeños que nos extrañan y que solo quieren estar con nosotros, saber y entender que es lo que nos sucede, porque lamentablemente no todos los pequeños comprenden las cosas tan fácilmente. 

Luego de cuatro días de encierro completo, metido en una clínica con un cuadro complejo de bronquitis asmatiforme, siendo nebulizado cada 6 horas, tomando pastillas y consumiendo otros inhaladores diversos que me ayudaron a limpiar mi sistema respiratorio, logré salir adelante. Sin embargo y dejando de lado el tema de las medicinas que son parte del tratamiento, estar atado a una cama sin poder hacer mucho es horrible. Ya lo he vivido antes, ya me ha pasado en dos situaciones anteriores donde la peor aventura fue pasar dos semanas sin poder moverme, literalmente hablando, me sentía cuadripléjico y solo con una operación a la columna me pudieron reparar, para luego pasar tres meses con descanso medico en casa sin poder cargar o jugar con mi hija, que es la peor pena de cárcel o castigo que un padre puede sufrir, no disfrutar de los tuyos es un asco. 

Cuando estas solo en este mundo es más fácil de manejar la situación, no tienes dependientes por los cuales tienes que librar batallas, en lugar de que ellos lo hagan por si solos, el nivel de responsabilidad es muy alto, sobre todo si tienes una hija pequeña, como es mi caso, la cual solo quiere estar conmigo, abrazarme y jugar, que puedo hacer si no puedo brindarle esas mínimas cosas por estar metido en una clínica, se siente fatal. Sé que hay veces que no podemos hacer gran cosa, que las adversidades están en tu contra, que Murphy si existe y que solo esta ahí para fregarte la vida, sales de una y caes en otra, sino es A entonces es B pero nunca sales bien librado tan fácilmente y el costo es alto e inmanejable, solo es cosa de agarrarte bien los pantalones y esquivar cuanta roca te caiga en el camino. 

Estar enfermo friega, estar enfermo te quita cosas, que hace cambiar de carácter, estas amargado, aburrido, hastiado de todo, solo quieres salir y seguir con tu vida, los tuyos pagan los platos rotos por ti, ellos tienen que afrontar los problemas que tú no puedes por estar enclaustrado, tu solo quieres darles todo lo que necesitan y todo lo que merecen, porque son tuyos y de nadie más, son tu responsabilidad y solo quieres estar ahí para ellos todo el tiempo del mundo, estar enfermo jode horriblemente todo, no quiero volver a tener que vivirlo pero son pocas cosas que uno puede hacer para evitar sucumbir tarde o temprano, ya sea por ambiente, polvo, desgaste físico o algún daño colateral, solo hay que cubrirse las espaldas con todo lo que se pueda llevar a cuestas y cruzar los dedos, todos ellos, para evitar un nuevo episodio de este tipo.

martes, 6 de diciembre de 2016

Tiempo en Pareja

Cuando nos enteramos que íbamos a ser papás, pensamos que las cosas no iban a cambiar mucho, sin embargo, las cosas han cambiado bastante, la responsabilidad y los tiempos han cambiado de orden, incluso nuestro tiempo de pareja se ha visto diezmado en demasía.

Cuando una pareja tiene un hijo todas las energías apuntan hacia esa nueva personita, dejas de hacer cosas por hacer otras, dejas de gastar en algo por gastar en algo diferente y así sucesivamente.

Nosotros cuando no éramos papás disfrutábamos mucho de nuestro tiempo libre y del de pareja, yo por mi parte salía bastante al cine o a comer con mis amigos, o con Mary nos íbamos a bailar o a tomar unos tragos y escuchar música en vivo o asistíamos a algún concierto. Ni bien llegó nuestra hija a nuestras vidas cambio todo eso, los primeros dos años han sido de abstinencia casi total, para mí era más fácil salir que para ella, el apego que teníamos era bastante fuerte, ni bien podíamos escaparnos o salíamos del departamento ya estábamos preocupados por si la bebé estaba bien o simplemente queríamos volver rápido.

La mamá de Mary nos ha apoyado muchísimo en ese sentido y nos sigue ayudando de vez en cuando, ella viene una vez al mes a quedarse con Mara y nosotros aprovechamos para salir esa noche, aunque sea a dar una vuelta a la manzana. No les voy a decir que está bien o mal querer salir, querer tener un tiempo propio o de pareja, para nosotros es importante tener esas pocas horas, aunque solo signifique caminar o pasear en el auto.

Ahora que Mara ya tiene más de tres años es un poco más sencillo salir, podemos dejarla dormida con la mamá de Mary, aunque no es una práctica constante, porque si salimos vamos los tres. Lo que si no lo puedo negar, si nos vamos al cine o a comer algo, pero ahora ya no somos dos, ahora somos tres y así vamos a donde sea que tengamos que ir.

En resumen y en una sola frase nuestras salidas son familiares.

martes, 8 de noviembre de 2016

Solo un Hijo

Primero que nada, quiero comentar que no tengo nada en contra de las familias numerosas, las que tienen más de dos, tres, cuatro y hasta más hijos, a mí me encantaría tener un hijo más y si es mujer mucho mejor. Ahora que ya dije esto puedo contarles lo que sigue.

En lo que va de estos tres años en el que somos padres nos habrán preguntado unas cuchumil quinientas treinta y dos veces "¿y para cuando el segundo?" y nos hacen comentarios de que siempre es bueno que mi hija tenga un hermanito para poder jugar o para que puedan protegerse y ayudarse cuando sean grandes y nosotros los viejos ya no estemos. Nosotros, que ya no somos tan jóvenes como hace 20 años, y les respondemos con una sonrisa explicando de forma sencilla que lamentablemente no está dentro de nuestros planes, es una respuesta simple pero contundente a la vez. Ahora si consideramos todas las variables, tener un segundo hijo involucra muchas más cosas de las que uno realmente ve en primera instancia. Considerando que mi hija tiene más de tres años ahora vemos las cosas con mucha más claridad.

Primero mi caso, yo soy hijo único, fui criado únicamente por mi mamá, quien hizo el papel de ambos padres durante toda mi etapa de crecimiento y desarrollo, mi papá nunca formó parte de mi vida, así que de hermanos, cero, no caen de los árboles como las manzanas, pero primos si tengo y varios, aunque no cumplen con el perfil de un hermano se acercan bastante. Yo crecí casi solo, jugaba solo, hacia mis tareas solo y así fui creciendo, casi solo. Mi familia siempre estuvo presente todo el tiempo, por eso mis abuelos son como mis papás y los hermanos de mi mamá son como mis hermanos, la palabra "tío" sólo se aplica más a las amistades de mis abuelos, todos los demás tienen nombres propios. Pero regresando al hecho de no tener hermanos con quienes jugar, no se me complico para nada, no me causo ningún tipo de problema o estrago en mi niñez, aunque tal vez podría considerar que el ser introvertido fue una etapa más crecimiento y aprendizaje, hoy soy todo lo contrario.

De mi esposa, Mary, ella si tiene varios hermanos, uff, son como 6, ahí si he visto durante todo el tiempo que llevamos juntos situaciones de alegría y de lucha sin cuartel, porque no todo es color de rosa entre hermanos, siempre hay situaciones de roce que pasan desde cosas tan tontas, como por ejemplo, ¿dónde está mi cartera?, ¿quién agarro X cosa? y la clásica ¿porque te pusiste eso si es mío y lo acabo de comprar?, cosas que pasan cuando todas son mujeres, porque los hermanos de Mary ya son mayores y para cuando llegué a su vida ya eran independientes, pero las hermanas menores aún estaban en la misma casa, así que ya se imaginaran.

Es cierto que antiguamente la cantidad de hijos por familia era numerosa, sino pregúntenle a sus abuelos, no había familias de un solo hijo, esos eran casos extraños, mi mamá tiene 4 hermanos más y otras familias cercanas con las que he crecido tienen como mínimo dos y he visto hasta familias de 7, 8 y 12 hermanos, ¿será porque no había televisión por cable en esa época?, sin embargo, las familias numerosas llenaban el hogar de vida, siempre se apoyaban y solo les importaba jugar, trabajar y vivir, no había la presión laboral que existe hoy en día, no habían tantos estudiosos universitarios como los hay ahora, las labores eran heredadas de generación en generación y así se pasaban los años. Ahora tienes que estudiar una carrera, una maestría y un doctorado y eso quita mucho tiempo.

Regresando al tema en cuestión, yo soy consciente que no podría darle la vida que merece a un segundo hijo, económicamente hablando y también de tiempo, además que el físico no rendiría lo suficiente al tratar de corretear a dos pequeños a la vez. Considerando que la experiencia vivida durante el embarazo anterior, las "n" complicaciones que tuvimos que pasar durante siete de los nueve meses fueron terribles, desde un internamiento de tres días, náuseas, vómitos y alto riesgo, no pondría nuevamente a mi esposa entre la vida y la muerte, menos aún si ya tenemos alguien que depende de nosotros, así me digan lo que sea y que tengamos realmente todas las ganas del mundo de tener un segundo hijo, es algo muy complicado, tal vez podríamos, de repente, quien sabe, adoptar más adelante, es una alternativa que ha estado dando vueltas en nuestras cabezas, pero por ahora nada de nada.

Estamos bastante tranquilos con lo que tenemos y con lo que somos, vamos un paso a la vez, con paciencia y buen humor estamos aprendiendo miles de cosas sobre nuestras nuevas responsabilidades, felices y contentos.

miércoles, 26 de octubre de 2016

Los maravillosamente terribles dos años

El tiempo pasa, el tiempo vuela y no hay nada que podamos hacer para detenerlo o disminuir su velocidad arrolladora, ese avance es continuo, no hay viajes en el tiempo, no hay pausas mágicas, todo sigue en constante movimiento, paso a paso por el largo camino de la vida. Es increíble que ya han pasado tres largos años desde la llegada de nuestra hija a nuestras vidas, a llenar ese espacio vacío que faltaba en nuestro mundo, de nuestra existencia. Nadie nos había preparado para su llegada, teníamos miles de dudas, no llevamos ningún curso de preparación previa, no existen capacitaciones perfectas ni diplomados o maestrías que cubran todo lo que significa ser padre, para que engañarme, aun no tengo todas las respuestas.

Dicen que cuando un hijo llega a cumplir los dos años, es desde ese momento que el día a día en la familia se convierten en los más terribles en la vida de un niño y de sus padres, y yo creo que esa afirmación es incorrecta, obviamente que desde mi punto de vista.

No hemos sufrido de ataques de histeria ni de pataletas incontrolables, todo ha estado dentro de los parámetros normales, asumiendo que los nuestros son correctos, habremos tenido suerte o lo peor aún no ha llegado a tocar nuestras puertas, no lo sé. Yo creo que desde que un bebe empieza a descubrir su entorno, sus alrededores, a gatear o caminar es cuando empiezan a ser terribles y temibles y todo esto es gracias a algo grandioso, a un término llamado "curiosidad", conocerlo todo, hacer de todo, agarrar de todo, comer de todo. La combinación de palabras "curiosidad+todo" han generado un nuevo significado para nosotros, los bebés están en todas, listos para aprender e imitar, ávidos de conocimiento y es ahí cuando debemos estar más que atentos a sus movimientos, es verdad que hay que darles un poco más de espacio e independencia, pero igual siempre hay que estar monitoreando, muchas veces los peores accidentes ocurren durante esos segundos que no estamos cerca.

Es obvio que cuando son más pequeños son más dependientes de nosotros, siempre bajo nuestra observación, atentos a todo, al principio no podíamos dejarla sola ni un segundo, a no ser que estuviera dormida, pero aun así debíamos tener siempre un ojo sobre ella. Ahora que ya es más grande tiene un poco más de espacio para actuar, la dejamos jugar sola mientras estamos haciendo otras cosas en la casa, pero siempre con el sensor de movimiento activado y el oído en su máxima capacidad de captación. Los tiempos cambian y los niños empiezan a querer hacer más cosas, están mas despiertos y te tienen de un lado a otro, siempre quieren jugar, salir a caminar, pasear en el auto, ver televisión y demás actividades. Yo por mi parte no disfruto mucho de todas estas actividades como me gustaría hacerlo, mi horario de trabajo es un poco extenso a veces y cuando llego a casa solo puedo disfrutar de la compañía de mi hija pocos minutos porque el sueño llama.

Lo bueno es que mi esposa disfruta de todas las actividades con mi hija, salvo cuando está en el nido-guardería pero el resto de las horas están de un lado para otro, me envía fotos y me cuenta cada cosa que hace nuestra hija, es emocionante ver cómo va descubriendo poco a poco todas las cosas que la vida le puede brindar, la música, el baile, la pintura, la plastilina, los libros, la tecnología, son tantas cosas tan divertidas que la verdad parece que falta tiempo para verlas todas, sé que está descubriendo el mundo y lo está haciendo bastante bien, lo único que debemos hacer es estar al tanto, siempre es mejor prevenir que lamentar.

¿Y tú ya llegaste a los terribles dos años de tu hijo?

viernes, 7 de octubre de 2016

Publicidad para Padres

Hace unos días tuve el gusto de ser entrevistado como parte de una investigación sobre paternidad asociada a la publicidad, tema que es para cubrir un proceso de tesis de la UPC. Lo interesante de esta entrevista es que el tema gira alrededor de como la publicidad y la paternidad está enfocada enteramente hacia la mujer y los hombres que somos papás solamente figuramos como un actor secundario que casi ni aparece.

Ahora, conversando con la señorita que me entrevistaba empezamos a tocar diversos temas, todos orientados a la paternidad, sobre lo que significa ser padre hoy en día, comparaciones con experiencias pasadas sobre como mis padres y mis abuelos educaron a sus hijos y como es ahora, si nuestra participación en casa es mucho mayor que antes, si nos involucramos más con nuestros hijos comparado con como nuestros padres se involucraron con nosotros y demás cosas. Fue divertido contar de todo un poco, recordar algunas cosas y comprar notas.

Lo que más llamo mi atención es que efectivamente la publicidad, no solo en este país, está orientada hacia mamá, papá no aparece en ningún comercial, salvo en fechas específicas como el día del padre, sino nada, es solo en esa fecha que aparecen spots publicitarios donde diversas marcas muestras al papá de la casa apoyando alguna situación con su hija o con su hijo, incluso me enseño tres comerciales diferentes donde aparece un padre ayudando a una hija que no puede oír a darse cuenta si es que están tocando el timbre, o un padre que le explica a su hijo que debe seguir un tratamiento porque gracias a él va a poder salvar vidas y que por eso va a ser un héroe, cosas de ese estilo, solo eso.

Sin embargo, nosotros, los papás de hoy, que estamos más involucrados en la educación y la crianza de nuestros hijos también participamos en temas que involucran lactancia, apego, colecho, porteo y todos esos términos tan de moda, estamos casi igual de capacitados para ir a comprar pañales, ropa, comida y demás accesorios. Los papás de hoy hemos aprendido tantas cosas que estamos en la capacidad de cambiar pañales en un baño público, que por suerte ahora tienen cambiadores o de preparar una mamadera, incluso sabemos diferenciar entre los tipos de leche que existen en el mercado, sabemos la diferencia de las diferentes gamas de pañales, así que tal vez podríamos tener algo de publicidad orientativa hacia nosotros.

Eso no significa que de la noche a la mañana empecemos a aparecer en televisión o en anuncios publicitarios, campañas o pancartas y letreros, esa no es la idea, pero nos gustaría tener más presencia y no solamente ser el que aporta desde las sobras: Las familias modernas de hoy tienen a la mamá trabajando y al papá en casa, o tal vez ambos trabajan y tienen la misma posibilidad de pasar a comprar algo por el supermercado, por eso creo que nuestro protagonismo va un poco más allá y seria de verdad genial ver más temas que nos puedan ayudar a nosotros a aprender más, incluso podrían considerar darnos un poco más de tiempo con nuestras familias cuando tenemos un recién nacido, cinco días no es mucho tiempo.

jueves, 6 de octubre de 2016

Tu serás lo que yo no soy

Si la memoria no me falla y si es que el disco de mi cerebro aún esta ordenado puedo recordar aquellas palabras que alguna vez he oído decírselas a diferentes padres hacia sus hijos y la verdad es que aún se siguen utilizando, hasta yo lo he hecho ya más de un par de veces aunque mi hija no las entienda aún por completo, le digo algo como "tú serás lo que yo aún no soy" o sino “tu tendrás los logros que yo no he podido lograr” y en resumidas cuentas le estoy dando a entender a ella y me estoy comprometiendo de manera directa a lograr que mi hija haga y logre todo lo que yo aún no he logrado hacer, y creo que ese es el deseo de todo padre de familia, que sus hijos sean mejores que nosotros, sus progenitores, que logren cumplir todo lo que a nosotros se nos truncó de una u otra manera, pero pensándolo bien y haciendo mea culpa, ¿no sería un poco egoísta de mi parte, siendo un padre como cualquiera, enfocar, encausar o dirigir a mi hija hacia mis metas incumplidas en lugar de hacer que ella decida por si sola cuando le toque realizar sus propias elecciones? recién en este momento me he puesto a pensar en esa gran gran pregunta.

La verdad es que cuando yo era niño/adolecente no recuerdo exactamente si mi mamá me decía cosas parecidas a esas, de si tenía que hacer algo específico, cumplir una meta como por ejemplo estudiar medicina o alguna otra cosa, yo solo recuerdo su apoyo incondicional y lo orgullosa que estaba de mi por las cosas que iba logrando por mi cuenta y esfuerzo propio, sobre todo, si ese logro estaba asociado con temas de estudios, no es que yo haya sido un súper excelente estudiante, yo solo estaba dentro del promedio, nunca sentí esa presión que algunos padres aplicaban sobre sus hijos por aquella época para que obtuvieran buenas notas, a mí me dejaba ser (dentro de lo correcto, claro), si yo no estudiaba era mi problema, no tenía a nadie detrás mío pidiendome que estudiara o para hacer las tareas, solo venían a preguntarme cómo iba avanzando, yo controlaba mis horarios y eso era genial. Incluso cuando decidí estudiar sistemas y no obtuve el ingreso a la universidad a la primera, tuve todo su apoyo, nunca recibí una jalada de orejas o algo parecido, incluso ahora a mis 41 años sigo sintiendo ese orgullo que mi madre tiene hacia mí, no me lo tiene que decir con palabras, con solo verle la mirada estoy más que convencido.

En casa estamos empezando a aplicar la misma técnica con la bubu, darle las pautas de lo que significa estudiar o no hacerlo, algo sobre las notas, el manejo de los tiempos y alguno que otro "tip", lo que no vamos a hacer es elegir por ella, al menos hasta que empiece a tomar conciencia por sus actos, por ahora debemos guiarla por el camino que más o menos hemos trazado para ella, incluso ya hemos conversado en pareja sobre las posibles carreras que podría estudiar, como me dice Mary a veces, después de que tenga sus tres carreras podremos estar tranquilos y que va a ser economista y que va a trabajar en el banco mundial, que nos va a llevar de viaje por todo el mundo y cosas como esas, ya se imaginaran las aventuras que nos tocaran vivir más adelante, soñar no cuesta nada, de repente termina siendo otra cosa totalmente diferente.

La verdad es que yo me siento muy contento de lo que he logrado hasta ahora, algunas cosas de manera individual y otras en pareja, familia o en grupo de amigos, soy consciente que aún tengo muchas cosas pendientes por cumplir y espero lograr hacer muchas de ellas, a mi hija no la voy a sobrecargar con temas que son responsabilidad enteramente mía, lo que ella logre hacer sola o con ayuda me llenara de orgullo y emoción y si ella es feliz por lograrlo mucho mejor.

¿Y tú, que siempre me lees, ya has pensado sobre el futuro de tus hijos?

jueves, 22 de septiembre de 2016

Hoy Son Tres

En la madrugada de hoy hace tres años decidiste llegar a nuestras vidas y a llenar ese vacío que existía en la familia. Hoy hace tres años nos diste la más grande alegría que puede existir en el mundo. Un día como hoy naciste.

Es increíble cómo pasa el tiempo, siempre estamos en constante movimiento, la tierra gira no se va a detener, los días pasan literalmente volando, pero cada día que pasa aprendemos algo nuevo contigo. Te hemos visto reír, llorar, gatear, comer, caminar, jugar, golpearte, gritar, reclamar, renegar, cantar, engreírte,  realmente son tantas experiencias vividas en tan solo tres cortos años que no sabemos cómo serán las siguientes aventuras, solo sabemos que estarás con nosotros para disfrutarlas en unión.

Es increíble lo despierta que eres, como hablas a tropel, dejándote entender tan fácilmente, aunque no siempre logramos captar a la primera lo que quieres decir, y reniegas cuando no te entendemos. Nos encanta jugar contigo, a las escondidas, a la chapada, al gira gira salta salta. Nos encanta llevarte a los juegos, al parque, a caminar, a tomar helado blanco.

Es increíble cómo has ido definiendo tus gustos, te encantan las albóndigas de carne y el pollo a la brasa, te fascina Frozen y todo lo relacionado a Elsa, si por tu fuera la verías todos los días. Te gusta Paw Patrol, Jake y los Piratas de Nunca Jamás y ahora lo último, PJ Masks, tienes bajo control del televisor y el DVD. Solo vemos Disney Channel o Discovery Kids.

Es increíble verte crecer, que la ropa ya no te quede, que escojas lo que quieres ponerte, verte leer uno de tus cuentos a tu manera, o contándonos una nueva versión de algún cuento tradicional mezclando los personajes, tienes una imaginación envidiable.

Te encantan las manualidades, cortar, pegar, pintar, jugar con plastilina, tu ultimo interés son las fichas del ajedrez. Eres una experta con las tablets y con los celulares, imagino que eso será por mi lado tecnológico, algo de mi debes haber heredado, supongo que la facilidad con los idiomas también debe ser herencia, ya sabes contar, incluso en inglés. Escuchas música en inglés, francés y hasta en ruso, vas a terminar siendo poliglota.

Es increíble escuchar como respondes y razonas, para tener solo tres años contestas a veces como una vieja, a tal nivel que nos dejas con la boca abierta, no sé si es normal, si a esta edad todos los niños tienen un desarrollo similar, aunque eres una esponja andante, todo imitas, todo replicas. Ayudas en todo lo que puedes y todo lo quieres ver, muchas veces estas más despierta que yo y me llevas de encuentro con tu imparable fuerza.

Es genial verte dormir, tan tranquila, pero lo mejor es cuando vas a despertarme, subiéndote a la cama y saltando encima de mí gritando “papi despierta!!!!”, mis domingos ya no son lo que eran antes, las prioridades han cambiado pero la diversión se mantiene, el sueño lo podré recuperar en algunos años.

Es más que increíble haber sido bendecidos con tu presencia, no pensábamos que íbamos a tener tanta suerte, eres el mejor regalo que hemos podido recibir, llenas la casa de energía y de bulla, sin ti nuestra vida sería monótona y aburrida, contigo siempre es algo diferente y nuevo, siempre aprendiendo juntos y disfrutándolo al máximo.

Muchas gracias Mara Sofía por iluminar nuestra familia, felices tres años de vida, te amamos un montón.

jueves, 15 de septiembre de 2016

Niño Malo

¿Nunca les ha pasado que cuando tú hijo(a) rompe algo, pierde algo o hace alguna travesura, por tratar de deslindar responsabilidades le echa la culpa a alguien más? Pues a nosotros si nos ha pasado y nos está pasando.

No es que mi hija rompa cosas a cada rato o las pierda o nos haga travesuras a cada rato, pero algunas veces, incluso cuando regresa del nido con algún quiñe, golpe o magulladura, a la hora de preguntarle nos dice que el niño malo fue el que hizo eso. Al principio estábamos preocupados, tratando de averiguar quién era ese supuesto niño, hablando con las profesoras del nido, con la directora, las auxiliares y no lográbamos atar cabos, los días pasaban y a veces volvía a casa con una nueva marca.

Suponíamos que por el hecho de jugar pasan ciertos accidentes, todos nos hemos caído o golpeado varias veces de pequeños así que no debería ser tan trágico, pero si encuentras arañones que fácilmente son producto de una mano pequeña, obviamente algo está pasando y nadie se está dando cuenta.

En varias ocasiones pensamos que el niño malo era producto de su imaginación y que las cosas que no regresaban a la casa eran simplemente olvidadas, suponíamos que eran cosas típicas de una niña de su edad y que pronto esos pequeños objetos volverian al hogar junto con ella, era cosa de esperar, pero no.

Resultó que el famoso niño malo era un niñito nuevo en el salón, algo mano larga y busca pleitos, cuando lo lograron identificar, las profesoras pudieron controlar mejor la situación. También nos enteramos que no era el único con ese perfil, hay una niña pequeña que también peca de manos ligeras y que discutía con otros compañeritos por un juguete o por alguna cosa más, y alguna vez se enfrentó con mi hija, que como no sabe defenderse y solo empuja, la otra pequeña fue directo al rostro. Esas son las cosas que suceden en los nidos pero que no deberían suceder, peor aún si nadie se da cuenta a tiempo como para controlar las situaciones.

Ahora en la casa cuando le llamamos la atención, su respuesta automática es echarle la culpa al niño malo, sabemos que a veces lo hace por jugar, pero otras no tanto, es por eso que debemos estar seguros de cuando tomar su respuesta en serio y cuando no, sobretodo Mary, ya que ella es quien está más tiempo en casa.

Son varias cosas que debemos supervisar, los niños conforme van creciendo van aprendiendo de todo, lo bueno y lo malo, así que es nuestro trabajo el estar pendientes de todo lo que sucede a su alrededor, para poder poco a poco corregir lo que se está saliendo de control y reforzar lo que está haciendo bien, apoyando y celebrando las cosas buenas, siempre hablando y explicando, los niños entienden bastante bien las cosas, más de lo que muchos suponen.

domingo, 14 de agosto de 2016

Feriado Largo

El pasado 28 de Julio, aprovechando el feriado largo por Fiestas Patrias, queríamos estar fuera de la casa el mayor tiempo posible, no es fácil, porque aquí en Lima no hay muchos lugares a los que podemos ir, ya sea por la distancia o por el presupuesto, a veces nos toca repetir el mismo lugar, varias veces, y como que eso hace que un sitio pierda el encanto. Este feriado largo estaba casi en el borde del mismo risco de la repetición.

Por lo general y siendo ya una tradición en la familia de mi esposa, siempre el 28 es almuerzo parrillada en la casa de mis suegros, ya es casi un "MUST" para esa fecha y es algo que se viene cocinando con varias semanas de anticipación, no hay forma de cambiarlo. Dejando de lado el compromiso familiar de esa fecha, es cuando empieza lo divertido del fin de semana, debemos buscar lugares a donde ir.

Esta vez decidimos ir hacia el sur, hacia Lurín, en la búsqueda de uno de esos restaurantes campestres con juegos y áreas verdes para los pequeños, como no sabíamos exactamente adonde ir solo teníamos la intención y la ruta. Ya llegando a la zona de desvío donde empiezan las instalaciones masivas de lugares para almorzar empezamos a recibir y revisar los volantes con las diferentes posibilidades culinarias que te van repartiendo en el camino, incluso íbamos corroborando contra las mismas páginas web de esos diferentes locales. Hubo uno que nos llamó bastante la atención, sobre todo por lo que aparecía en su página y por las fotos, siempre es bueno ir a nuevos lugares, aunque a veces pecamos de inocentes, esta vez no sabíamos que tan lejos teníamos que ir, pero como ya estábamos a medio camino, decidimos seguir en ruta hasta donde fuera necesario.

Bueno, a este nuevo restaurante nunca habíamos ido, uno nunca sabe lo que puede ocurrir en una primera visita, no sabes a que te vas a enfrentar, si el lugar está bien o no o si la atención será buena, si la comida será la correcta, sobre todo cuando tienes hijos pequeños, los riesgos son varios, pero hay veces en que se deben asumir y probar nuevas cosas, sino las aventuras serian aburridas, y como esta era la primera vez que los visitábamos teníamos que quitarnos el clavo. Por suerte todo muy bien, buena atención, buenas instalaciones, juegos novedosos y buena comida. Tienen juegos para niños no tan chicos y para niños no tan grandes y bastante área verde. Tienen un bungy jumping, tienen canopy para mayores de 6 años, una red inmensa que parece una tela de araña gigante y hasta un laberinto medianamente grande. Fue un gran hallazgo, estuvimos ahí hasta las 5pm y los chicos regresaron agotados. El lugar se llama Eco Limo Park.

Ya de regreso a nuestra rutina de fin de semana, nuestro sábado fue de ciudad, nos tocó caritas pintadas, Coney Park y YuKids como casi todos los fines de semana, como tienen diferentes locales por toda la ciudad es fácil rotar de un local a otro, diferentes atracciones en diferentes fechas no lo hacen tan rutinario. Ya para cerrar con broche de oro, misma cereza sobre el pastel, Mara termino disfrutando de una hora a caballo en el club Hipocampo en Chorrillos, donde ella y nosotros terminamos más que enterrados, más nosotros que ella porque íbamos a pie, ella era la que disfrutaba del caballo y de la vista privilegiada del asiento de piloto, fue una bonita experiencia, creo que podremos repetirla más adelante.

En resumen, fue un fin de semana diferente, logramos disfrutar del tiempo en familia, jugamos hasta agotarnos y termínanos súper felices, que es lo más importante. Ahora a esperar el siguiente feriado largo.


lunes, 8 de agosto de 2016

Errores

No siempre lo sabemos todo, no tenemos cursos sobre crianza, educación, apego, colecho, medicina, lactancia y demás hierbas, cuando llega un hijo a tu vida tienes que aprender sobre la marcha y muchas veces aprender cuesta, duele, te hace perder la paciencia y llorar de la impotencia. A mí me está costando mucho más que Mary, incluso yo cometo más errores que ella, por desconocimiento, por no escuchar bien las cosas o por simplemente creer que estoy haciéndolo bien y es ahí cuando salen las chispas por la fricción entre nosotros, yo no lo sé todo y ella tampoco, hago el mejor esfuerzo, pero no siempre obtengo el resultado esperado.

Imagino que no soy el único papá sin una maestría de especialización en cómo hacer las cosas con una hija, que trata y muestra interés pero que termina peor que trapeador de piso, que no tiene los genes preparados y que simplemente trata de hacer la diferencia. Sé que muchas veces he tratado de quitar cintura, de hacerme el loco, peor, aunque esté desecho después de un asqueroso día de trabajo, tengo que llegar a casa a seguir haciendo más cosas, esperar que mi hija se duerma para poder hacer otros trabajos, tareas de los cursos que estoy estudiando o corregir exámenes, es la de terminar a las dos de la madrugada y dormir solo seis horas o menos. Esa es la vida del artista que he decidido llevar desde el momento en que decidimos tener un hijo, y eso que recién tengo algo menos de tres años de experiencia en estos menesteres y se muy en el fondo que tengo para unos 15 años más, con suerte, para jubilarme y vivir de mis logros como padre abnegado y agotado.

Es horrible cuando te llaman la atención por hacer algo mal, o por no hacer nada, a veces prefiero mantenerme al margen, preguntar más de una vez para estar seguro de no malograr nada, aunque exista el riesgo de sufrir alguna consecuencia parecida a una bomba nuclear contenida entre cuatro paredes. Desaparecer no es una opción viable, porque macho que se respeta aguanta de todo y aprende de las experiencias, se lame las heridas y se prepara para la siguiente jornada.

Últimamente sólo quiero dormir y descansar, pero no se puede, el agotamiento me está pasando factura, pero yo sé que Mary está más cansada que yo y hay que darle una mano, o las dos, o todo el cuerpo, hay que compartir el peso juntos, por algo somos pareja, por algo decidimos formar una familia. Yo elegí este camino y no lo elegí solo, somos dos los actores principales en este largometraje llamado vida, con muchos más actores secundarios y de reparto, ¿sin ellos que sería de nosotros?, tal vez estaríamos peor, sin embargo, aquí andamos dando lo mejor que podemos, sólo con la consigna de lograr que nuestra pequeña tenga lo mejor que podemos brindarle.

En resumidas cuentas, todos nos podemos equivocar, no somos perfectos, sólo debemos aprender de los golpes y de las caídas, pararnos y continuar por nuestro camino juntos.

miércoles, 27 de julio de 2016

Educación en Serio - Nota de Prensa

La conferencista y comunicadora social, Giuliana Caccia, presentará su nuevo libro “Educación en serio” en la Feria Internacional del Libro gracias a Editorial Planeta. Dicha publicación busca explorar los temas vitales para la formación y convivencia de las familias, a la vez invita a reflexionar sobre el matrimonio, la paternidad y los hijos, poniendo énfasis en el rol que cada uno de ellos ocupa y la importancia de la educación coherente, los valores y la tolerancia.

Este libro quiere ir más allá de aquellos consejos clásicos de todo libro de autoayuda parental, ya que invita a sus lectores a reflexionar sobre sucesos de la vida diaria, dando respuestas a simples preguntas que los padres se hacen a diario. Muchas veces son ellos los que se cuestionan sobre el verdadero significado de una familia, y si están haciendo lo correcto con la educación de sus hijos, preguntas simples, pero a la vez muy complejas de responder.

Es por ello que la autora parte de su propia experiencia personal para explicar a todos los lectores el verdadero significado de la educación en serio. Dividido en 5 capítulos, el libro abordará diversos temas relacionados a la familia, a la educación de los hijos, a la confianza que se deben tener todos los miembros de la familia, al valor de la comunicación, entre muchos otros temas que ayudarán a los padres a ser los héroes que sus hijos realmente necesitan.

La presentación oficial del libro será el viernes 29 de julio a las 7:00 p.m. en la sala Abraham Valdelomar de la 21va edición de la Feria Internacional del Libro de Lima ubicada en el parque Próceres de la Independencia en Jesús María. Luego de la presentación, Giuliana Caccia realizará una firma de libros para todos sus seguidores y público en general.

GIULIANA CACCIA ARANA

Giuliana Caccia Arana nació en 1975 en Lima. Es comunicadora, coach, conferencista y máster en Matrimonio y Familia. Tiene el blog “La Mamá Oca” que orienta a los padres en la crianza de sus hijos.

Hace unos años inició La Mamá Oca, un proyecto que ofrece información y programas formativos en la educación en virtudes y desarrollo de competencias familiares, tanto a grupos de padres y educadores como a los colaboradores de empresas. Es conferencista y colabora con distintos medios de comunicación de Perú, México, Ecuador, Colombia, Chile e Italia.

martes, 12 de julio de 2016

Partos Distintos

Hace unos días visitando a una amiga que se acaba de convertir en mamá hace unos meses atrás, pudimos sentarnos a conversar e intercambiar experiencias con ella y con una tercera mamá que también había coincidido con nosotros. Todo se resume en una frase, todos los partos son distintos, las experiencias de cada mamá, desde el momento en que entra a la clínica o hospital a traer al mundo a su hijo(a), es diferente, nunca jamás vamos a encontrar dos experiencias idénticas. Lo único en común en este caso es que las tres tuvieron hijas mujeres y las tres fueron cesareadas.

Las diferentes aventuras de las tres mamás que habían coincidido aquella noche fue un intercambio de diferentes experiencias, tips, aventuras, desventuras y demás temas, temas que ahora forman parte del bagaje de conversaciones en las que termino involucrado, de una u otra forma, porque yo también meto mi cuchara, opino, comento, recomiendo, escucho y hago chacota. Usualmente los hombres se mantienen al margen en estos temas, aun no sé porque, algunos si conversan, otros no, pero en fin.

Nunca he escrito sobre lo que significo aquella noche del 22 de Setiembre de 2013, cuando tuve que llevar a Mary de emergencia a la clínica cerca de las 10pm, peor aun cuando nuestra cesárea estaba programada para el siguiente lunes, y todo fue por la culpa de un antojo que llego demasiado tarde a nuestras vidas. Mary nunca me pidió nada extraño durante su embarazo, con las justas un pescado frito y en horario regular, pero nada complejo, hasta ese día que me dijo que quería pollo del KFC, no había forma de que le comprara eso y menos si faltaban 48 horas para que la tuvieran que operar, así que un palito de anticucho cumplió con cubrir esa necesidad de alimentos a esa hora de la noche y la situación cambió radicalmente de color, había que volar, literalmente a la clínica.

Las experiencias contadas fueron diferentes, no todos pasan por la misma vivencia, algunas mamás llegan caminando, otras en taxi, otras en ambulancia, la mía llego en mi auto, que se transformó en el Max 5 y yo en el Meteoro Gordo de Lima. Mis amigas llegaron caminando a sus respectivas clínicas, porque pudieron entrar en el momento en el que las habían programado, las tres fueron cesáreas por diversas razones, pero fueron cesáreas necesarias. Mary entro al quirófano sola, yo me quede afuera porque era una emergencia, la pareja de mi amiga, a quien habíamos ido a visitar entro al quirófano tranquila y relajada pero luego de unos minutos empezó a cambiar de estado de ánimo llegando al punto de la histeria, tuvo que ser dormida para que pudieran operarla, su pareja se quedó también afuera porque la llegada de su hija se complicó, no tanto por la bebe sino más por la mamá. La tercera participante estuvo tranquila y relajada en todo momento, pero no dilató lo necesario y el dolor era cada vez más intenso, fuerte y continuo, por eso fue la cesárea.

Mary estuvo sola, pero pudo ver a nuestra hija un ratito ni bien llego al mundo, yo la vi afuera, cuando pasaba en una incubadora hacia otra de las salas del 5to piso de la clínica, eran como la 1:30am y mi familia y yo seguíamos esperando, solo pude verla 5 minutos porque me dejaron entrar a la zona de bebes, ella se quedó en incubadora hasta el día siguiente. Mary no salió y no la vi hasta el domingo a las 8am, se complicó la operación, se demoraron en cerrar el corte y la llevaron a la UCI, el doctor salió y me dijo que volviera al día siguiente. La pareja de mi amiga sufrió casi lo mismo, se quedó afuera, vestido y listo, no le decían nada, cuando salió su hija con las auxiliares corriendo, tampoco le dijeron nada, la incertidumbre fue lo peor, recién a los minutos le comentaron que hubo una complicación y que su pareja iba a estar en la UCI, él pudo ver a su hija en esos momentos, su mamá la conoció casi al tercer día y a través de una ventana.

De nuestra tercera amiga, la figura fue mucho más tranquila, el entro con ella, vivió en carne propia la llegada de su hija, estuvo con ella todo el tiempo que se pudo, conocieron a su hija juntos y tienen fotos para demostrarlo, ni yo ni la pareja de mi otra amiga pudimos vivir eso, disfrutarlo y tener un recuerdo para demostrar la sensación tan fantástica que es recibir a un bebé, solo tenemos el recuerdo de una mala noche o mala mañana, esperando y esperando, cruzando los dedos, con fe y con la esperanza de que todo iba a terminar rápido y bien.

Ahora las tres familias estamos más que contentas, felices y locos, cada uno de nosotros vive el presente, recuerda el pasado, y espera el futuro, un paso a la vez con paciencia y buen humor.

viernes, 1 de julio de 2016

¿Qué hubiera pasado si?

Que hubiera pasado si las cosas fueran distintas, que sería de mí si mis decisiones pasadas me hubieran hecho tomar rutas distintas, de repente no estaría escribiendo estas líneas, tal vez no estuviera casado con la mujer que comparte mi vida desde hace poco mas de 6 años y de repente no tendría una hija de casi 3 años.

Que hubiera pasado si hubiese decidido volver a postular a la universidad allá por el año 92, que sería de mí si hubiera aceptado irme a vivir a Canadá allá por el año 95, que influencias hubiera tenido si mi papá hubiera decidido compartir su vida conmigo y con mi madre. Donde estaría yo si me hubiese quedado trabajando en el puesto "A" de la empresa "X" en lugar de cambiarlo por el puesto "B" de la empresa "Y", tal vez estaría en un puesto gerencial o trabajando en el extrajero.

Que tantos ahorros tendría si no hubiera reventado mis tarjetas de crédito, más por la emoción de poder comprar de todo y sin medir las consecuencias, que hubiera pasado si hubiese decidido ingresar a la universidad antes del 2004 para culminar mi carrera de ingeniería. De repente tendría otra familia diferente si me hubiera atrevido a decirle a la chica del colegio que me gustaba, en lugar de quedarme callado y guardarme mis sentimientos. Quizas hubiera destrozado el auto si hubiera sacado brevete a los 18 en lugar de hacerlo a los 25. Realmente son tantas preguntas en base a tantos supuestos que podrían volverlo loco a cualquiera.

Si me hubiera casado mucho antes, ¿tendría otra familia?, ¿tendría mas hijos?, no se si sería el mismo papá que soh ahora si en lugar de tener 1 hija tuviera 3, tendría más probabilidades de conocer a mis nietos, por un tema de edad, o tal vez a mis bisnietos, disfrutaría de ellos mientras veo la televisión tomando un café con leche, no lo sé y creo que no lo sabré todavía, queda mucho por recorrer.

¿Y a que va esta catarsis de preguntas elaboradas que no vienen al caso ahorita? Sé que no van a cambiar mi pasado ni mi presente y menos mi futuro, ya lo que tenía que pasar pasó y no puedo volver atrás, tengo una hija hermosa, una excelente esposa, una familia increíble, unos amigos que no cambiaría por nada en el mundo. Todos ellos llegaron en el momento que correspondía, yo no decidí por ellos y ellos no decidieron por su cuenta, las cosas pasaron y punto. 

No me arrepiento de lo que tengo, de lo que he logrado y de lo que voy a lograr a futuro, en un año o en cinco, sé que he fallado en muchas cosas, pero de eso se trata la vida, de aprender de las metidas de pata y de salir airoso nuevamente.

Hoy vivo por mi familia y más por mi hija, por eso te digo que aceptes lo que tienes, disfrútalo, gózalo y no te sientas menos por lo que tienes y por lo que eres, no a todos nos llegan las cosas a la misma vez y a la misma velocidad. Eres un grandioso padre, una grandiosa madre y tienes un grandioso futuro por delante.

lunes, 13 de junio de 2016

Visitando a los Bomberos

Nosotros siempre aprovechamos los fines de semana lo más que se pueda, tratando de hacer todo tipo de actividades, desde salir a dar una vuelta en auto o al parque a jugar un rato, hasta salir de Lima y pasar un bonito día, esta vez se me ocurrió la grandiosa idea de ir a visitar a los bomberos de la estación France 3 que está ubicada en el centro de Lima. La visita fue más que todo por un tema de investigación familiar mía pero que mejor forma de aprovechar la visita para que mi esposa y la Bubu conozcan una verdadera estación de bomberos.

En primera instancia teníamos la idea de salir a eso de las 3pm de la tarde porque me habían citado a las 4pm, pero una llamada telefónica movió el horario de la visita a las 5pm así que nuestras horas se tuvieron que reacomodar, por suerte pudimos hacer un par de cosas antes de ir a la visita. Nos habremos demorado en llegar aproximadamente 35 minutos entre el tráfico y un par de vueltas extras por entrar a una calle equivocada pero igual llegamos. Nos recibieron bien, fueron muy atentos y nos presentaron poco a poco al personal, poco a poco fueron llegando más miembros de la estación dándole vida y movimiento. La estación es pequeña, más pequeña de lo que pensaba, un local antiguo y alargado, las unidades estaban estacionadas en doble fila y si había una emergencia y era necesario mover una de las unidades para sacar la otra, pero bueno, hay que utilizar el espacio lo mejor posible.

Como bien decía líneas arriba, el personal fue muy atento y nos mostraron los equipos y las unidades, nos dejaron subir a ellas y tomarnos muchas fotos, mi hija fue la que más se divirtió, andaba de un lugar a otro sin decidir a cuál camión subir o a donde entrar primero, no podía esperar menos de ella, con lo inquieta que es. En resumidas cuentas, fue una excelente idea ir a visitarlos y pasamos un excelente par de horas.

Mi idea original de la visita fue por una investigación familia que llevo haciendo desde hace un tiempo y porque dentro de mis antepasados existe familia que formo parte del personal que estuvo a cargo de esa estación, allá entre los años 1870 y 1920, con cargos de comandante e incluso uno de ellos es reconocido como héroe caído en el deber. Pude ver mucha de su historia y sacar algunas fotos para el archivo familiar, como bien decía, una tarde excelente.

¿Y tú a donde llevarías a tus hijos para tener una excelente tarde de diversión?


miércoles, 18 de mayo de 2016

Dejando el Pañal

A todos nos gusta ver cómo nuestros hijos van aprendiendo y creciendo y creo que uno de los más grandes logros es dejar el pañal, ya sea de tela o desechable, de la marca X o de la marca Y, dejar de usarlos es parte de la vida, es un hito muy importante, que tarde o temprano todos los niños y las niñas deben vivir.

Nuestra hija es de decisiones firmes, ella misma decidió dejar de tomar pecho, ella decidió en que momento ir a dormir a su cuarto y ahora decidió dejar de usar pañales. Obviamente que el cambio es un proceso que no es de un día para otro, toma mucho tiempo y mucha paciencia. Ya tenemos entre seis y ocho meses en el proceso de ajuste y creo que vamos bastante bien.

El año pasado, por el mes de Agosto iniciamos las pruebas, uniendo esfuerzos con el nido empezamos a enseñarle a ir al baño, a pedir pis y que se vaya acostumbrarla de a pocos, en esos primeros días se siguen usando pañales pero vas dejándolo de hacer, primero la dejábamos sin pañal un par de horas, luego fuimos aumentando el rango de horas hasta que podía estar sin usarlo casi todo el día. Estaba claro que teníamos que estar llevándola al baño a cada rato solo por si acaso, pero ahora pide regularmente y casi no ha fallado, salvo cuando está muy entretenida, se olvida y ahí vienen los accidentes, pero normal, no nos hacemos paltas, la cambiamos y listo.

La parte nocturna también fue algo similar, después de que dejo de usarlos en el día por completo, empezamos a tratar con las noches. No hemos sufrido de muchos accidentes en cama, pero si la hemos tenido algo complicada. Nuestro trabajo ha sido el estar dormidos pero despiertos a la vez, atentos al llamado de alerta de nuestra pequeña a cualquier hora de la madrugada por si necesita que la llevemos al baño, puede tocarnos llevarla entre la media noche y las 4:30am, pero siempre es en ese rango de acción, aunque han habido un par de veces que se ha ido de corrido hasta las 5 o 6 de la mañana sin llamarnos. En estos últimos días seguimos estando atentos a su llamado y sigue haciéndolo todas las noches, pero ahora con el cambio de clima la cosa está más complicada porque el frío hace que le gane y que nos llame cuando ya es demasiado tarde, ya nos ha tocado tener que sacar el colchón a que tome aire y cambiar las sábanas.

Lo que sí es bien complicado, y que nos ha tocado pasar, ha sido cuando estamos en el auto y a veces el paseo puede ser un poco largo, justo cuando menos lo esperas y para nuestra mala suerte nos pide ir al baño, caballero nomas, tenemos que pedir baño en algún local comercial o restaurante que nos quede en la ruta, por suerte hasta ahora la hemos tenido fácil, siempre nos han ayudado con la bebe. Lo que sí es feo es que a veces no sabemos lo que podemos encontrar adentro de estos servicios higiénicos no tan higiénicos que digamos, ya para sorpresas estamos bien curtidos.

También me ha pasado, y creo que debe ser usual que suceda cuando eres padre de una niña, es que a veces mi hija me pide a mí que la lleve al baño y como es obvio, yo no puedo entrar al baño de mujeres, no todos los lugares tienen servicios para niños, y lo complejo es cuando estamos en un lugar público con baños de uso masivo, en esos casos debo buscar un baño individual o hago una revisión previa antes de entrar con la bebe o mejor para mí, hago que mi esposa la lleve. Nosotros tenemos muy en claro que debemos mantener la separación de géneros niño/niña por obvias razones, poco a poco se hará mucho más evidente, más aun si como yo tienes una hija.

Y a ti ¿qué tanto te cuesta llevar a tu hijo/hija a los servicios higiénicos?

domingo, 8 de mayo de 2016

Madre hay solo Una

El termino Mamá no es sólo se aplica de manera simple a la persona que me trajo al mundo, significa mucho más que eso, no solo es un trabajo de medio tiempo porque el resto del día está en la oficina, no solo se aplica por el simple hecho de tener un niño en el vientre por poco menos de nueve meses, no es porque tienes uno, dos, tres o más hijos que vienen a cualquier hora del día o de la noche y con solo decir "mamá" consiguen lo que sea. No señores, es mucho muchísimo más que solo eso.

Una madre forma parte de nuestras vidas desde que llegamos a este planeta, nos acompaña siempre, en las buenas y en las malas, es un apoyo eterno para nuestros problemas, es un oído atento a cualquier problema que queramos contarle, es el hombro perfecto para llorar nuestras penas y es la primera en alegrarse de nuestros logros. Es quien nos empuja siempre para que logremos ser mejores y que cumplamos nuestros logros, es quien se desvela esperándonos en las noches cuando no llegamos, es quien nos deja un plato de comida lista y caliente sin importar la hora en que lo necesitemos. Es quien nos jala las orejas cuando la fregamos, es quien nos enseña a tomar decisiones complicadas, es quien nos lleva cuestas y nos hace dormir, es quien se preocupa todo el tiempo por nosotros, aun estando casados y con hijos propios. Es la cuenta bancaria con más fondo en el mundo, con una tasa de interés de cero y que no cobra moras ni te penaliza por demorarte, es quien te lleva de compras y te llena de regalos si es que están a su alcance, es quien te dice que "SI" o que "NO" cuando pides permiso para salir, ella sabe mucho más de la vida que nosotros, porque ya le ha tocado vivirla mucho antes, tiene más tiempo que nosotros en este mundo y por más de que nosotros digamos que no sabe nada, pues sabe mucho más de lo que creemos. Es quien nos abriga, nos cobija, nos carga y nos hace dormir en sus brazos, aunque tengas 40 y ella 60, nunca te va a negar nada.

Tiene el poder de leer la mente, sabe cuándo estamos enamorados, alegres o tristes con solo mirarnos a la cara, sabe cuándo tenemos un problema, aunque le digamos que no pasa nada, no la podemos engañar. Tiene el poder del sabor, nunca probaras algo horrible de sus manos, tiene el poder del orden y de la limpieza, sabe cómo sacar todas las manchas inimaginables de la ropa, es dibujante, matemática, literaria, historiadora y educadora física, psicóloga, economista, experta en logística y en compras, siempre tiene un as en la manga cuando menos te lo esperas.

Ahora, para mí, de manera personal y con el perdón del resto de madres del planeta, mi mamá es la mejor en el mundo, ha sido, es y será mi mayor orgullo, ella es madre y padre para mí, así que con ella es doble la celebración, ella sola me ha sacado adelante y ella celebra conmigo y con mi familia de mis logros. Pero ya no solo existe ella en mi mundo, tengo mi esposa que ahora también es madre, por eso, mamá es quien trajo al mundo a mi hija, es quien vela por ella cuando yo no estoy, es quien sufrió durante el embarazo, es quien llena de besos, abrazos y cariños a mi pequeña, es quien tiene todo listo y nunca le falta nada. Pero no puedo dejar de mencionar a mi suegra, ya que sin ella no tendría a la mujer que completa mi vida.

En resumen, con alegría y emoción puedo decir que tengo mi vida completa, no necesito decir más.

viernes, 6 de mayo de 2016

Papá no te Vayas a Trabajas

Desde hace poco más de dos semanas mi hija se ha estado dando cuenta de que debo salir todas las mañanas temprano a trabajar, como todos los que somos padres trabajadores y que con mucha pena debemos poner rumbo a nuestras oficinas, aunque al inicio no ha sido tan traumático ahora ya está empezando a cobrar nuevos matices. Es difícil tener que salir temprano, mi hija se despierta también temprano porque tiene que alistarse para ir al nido así que ambos andamos en preparativos mañaneros casi al mismo tiempo.

Creo que la peor parte es cuando me pregunta si es que tengo que ir a trabajar, con ese rostro triste y decaído que ya desde antes de preguntar sabe la respuesta, y yo solo atino a responderle que sí. Tener el rostro de tu hija con cara de tristeza diciéndote que no vayas y que te abraza para no soltarte, esa es la peor parte del día, empezar la jornada de trabajo diario de esa forma no ayuda y aunque sé que no se puede evitar a veces me gustaría poder quedarme en casa con mi familia. Con Mary tenemos que ingeniarnos la mejor forma para que pueda escaparme sin que mi hija se dé cuenta, no es la mejor de las formas, ahora lo que hago es explicarle que tengo que salir y que luego más tarde me va a tener en casa para poder jugar, un poco que me entiende, pero sé que su entendimiento sobre lo que significa más tarde aun no es comprendido al cien por ciento, la dimensión del tiempo esta aun fuera de su entendimiento total, pero logra calmar un poco la tempestad.

No me gusta tener que escabullirme en las mañanas para poder salir, sé que no es lo mejor, es torturante y agotador, un inicio así todos los días molesta a cualquiera, más aún porque también trabajo los sábados, imagínense eso. A veces tengo que salir por alguna otra cosa que no es trabajo y la pregunta de mi hija es la misma, "vas a ir a trabajar?" y le digo que no y le explico que es lo que voy a hacer y me entiende. Algunas veces me acompaña, vamos sólo los dos, antes íbamos de a tres, pero estoy empezando a tener mi espacio, de padre e hija, solo con ella, poco a poco voy viendo que no es tan complicado salir de a dos, aunque no es que me demore mucho, pero por algún lugar se empieza.

Espero que con el paso del tiempo mi hija vaya comprendiendo mucho mejor algunas de las cosas que van sucediendo de manera cotidiana, no siempre se va a poder tener lo que se quiere y debemos tratar de que entienda eso, que yo debo salir a trabajar y que volveré al final del día para estar con ella.

Y tú, ¿cómo haces para salir a trabajar todas las mañanas sin sentirte destrozado por dentro?

viernes, 29 de abril de 2016

Mi Momento Favorito del Día

Qué difícil es salir todos los días a trabajar, dejar en casa a la familia, incluso dormida, para cumplir con las labores y responsabilidades de un mundo económicamente amarrado a tu bolsillo, donde si no produces no logras cubrir las necesidades básicas de una familia que de una forma u otra dependen de ti, pero bueno, no voy a hablar de penas, porque no todo debe moverse en esa dirección.

Como padre primerizo, entrado en años, siempre aprendiendo algo nuevo todos los días, el mejor momento de mi día es cuando llega la noche, la hora de salir de la oficina para llegar a casa a disfrutar de unas pocas horas con los tuyos, es una recompensa muy grata, no lo voy a negar y lamentablemente a veces no logro llegar a tiempo, me ganan los minutos y termino solo mientras los míos duermen profundamente.

Hay que tener en cuenta que no siempre llego a casa temprano y no siempre encuentro a mi hija despierta para que me reciba con esa sonrisa y esa algarabía que tanto la caracteriza, también hay veces en que me ganan, yo les aviso que ya estoy en camino y me sorprenden en el paradero del bus o mientras camino esas dos cuadras que separan al paradero de la puerta del condominio.

Todos los días al salir de casa y al regresar, la mejor parte es cuando entro al departamento y ya desde adentro voy escuchando la voz de mi hija que se da cuenta que suenan las llaves, que se abre la puerta, que seden las bisagras y que ni bien se termina esa ceremonia de entrada, ya la tengo trepada encima mío gritando "Papi!!!!" con una sonrisa en los labios, un brillo en los ojos que es increíble y que logra eliminar todo el cansancio, el estrés del trabajo, los malos ratos y las broncas, todo eso queda fuera, ese abrazo lo borra todo y es más que suficiente para reponer toda la energía perdida, solo quieres despojarte de las cosas que cargas, entrar, tirarte al suelo y jugar, escuchar todas las aventuras y logros del día, que tu hija te lleve de la mano por la casa enseñándote lo que ha hecho, hablando a su manera sin soltarme la mano.

La verdad es que no importa si es en la ruta o cuando llego a la casa, ese recibimiento es lo mejor de lo mejor.

Y para tí, ¿cuál es tu momento favorito del día?

jueves, 21 de abril de 2016

Pilas y mas pilas

Antes de que piensen que este artículo se relaciona con la cantidad de veces que mi hija va al baño, pues no, se equivocan, el tema no tiene nada que ver con eso, en este caso me refiero a las pilas/baterías que los juguetes que existen hoy en el mercado requieren para su completo funcionamiento, para asegurar horas de diversión y entretenimiento.

Justo recién he caído en cuenta, el fin de semana pasado, de la cantidad de cosas que tiene mi hija que necesitan pilas, no son miles ni cientos, pero habrá algunos cuantos aparatejos que requieren de energía extra para que puedan operar y si mi inventario no me engaña estaremos bordeando la docena, si es que no son un poco más.

Sé que hay todo tipo de juguetes, la gran mayoría son de interacción directa, es decir, hay que moverlos manualmente, pero hay muchos otros que necesitan energía adicional, esa energía permite a los hermosos juguetes que se prendan las luces, para que muevan alguna cosa o se muevan por completo. Mi hija tiene una batería musical que usa tres pilas y un piano que también usa otras tres, sólo por mencionar dos de ellos, tenemos trenes, un hipopótamo cantarín, un celular, una cámara fotográfica y hay algunas muñecas que cantan. Es impresionante e increíble, todos son juguetes y todos usan pilas y más pilas. No sé cuántos paquetes de pilas de 16 o de 24 unidades ya hemos usado y recién me percato de ese pequeño detalle porque tuve que cambiar las pilas del piano y al buscar los reemplazos veo que no me quedan ya muchas de repuesto, tres más que se van.

No tengo nada en contra de la cosas que usan pilas para funcionar pero hay que tener un presupuesto aparte para la compra de accesorios, obviamente que hay otros juguetes y otras formas de jugar y ya es tema de nosotros como padres hacer que nuestra peque apunte más para ese lado, pero no podemos combatir contra las luces de colores y las canciones de moda. También tengo que tener en cuenta que las pilas no se pueden desechar tan fácilmente, hay que dejarlas en los contenedores apropiados que se encuentran afuera de las tiendas, porque la verdad tirarlas a la basura como que no es una buena idea.

En casa estamos tratando de disminuir el uso de estos equipos, esos aparatos que necesiten energía brindada por pilas, hay algunos que ya fueron dados de baja pero hay otros que aún siguen en vigencia, dando vueltas por la casa, poco a poco estamos orientadora los juegos más hacia la interacción, ya sea con nosotros o con otras personas, la idea es que use sus muñecos y que la imaginación sea la que fluya y que no esté mirando fijamente a un tren que da vueltas y más vueltas. Sabemos que no podemos cortar todo a la primera pero vamos ganado algo de terreno poco a poco, un paso a la vez.

Y tú, ¿ya te diste cuenta de cuantas pilas utilizan los aparatos de tus hijos?